REMONTAR

Esto actual de mi estado es como subir una montaña de espaldas, ¿A que es difícil? Seguramente si, no se si hay solución, y ni si los medicamentos me hacen efecto. Por momentos dan la semblanza que no, que son como caramelos sin saber definido que lo único que me dan es sueño, pero durante el día no parecen hacer el efecto que quisiera.  Mejor no enterarse de nada antes que estar en este estado de desánimo continuo, así no puedo volver a estar activo como lo hacia antes.
¿Que le voy a decir al médico? ¿Que estoy nervioso otra vez?¿Es motivo para estar de baja? No lo se, la cuestión es que quiero volver a estar solo, en silencio, sin hablar con nadie y eso que «mi otra parte contratante» no hace más que animarme. De no ser por ella o ya me había hecho la caja entera de lo que encuentre para dormir para siempre, otra vez vuelven «las oscuras golondrinas», aquellas que no deberían volver, pero aún están ahí revoloteando, murmurando, no se como acabaré.
Hoy los ojos están rojos todo el día, en continuidad, sin levantar el ánimo, ni querer hablar con nadie, no se como acabaré, si aquí o en los «Idus de Marte», cerca del Oplympo, con aquel con llevaba la parca de los griegos.
¡Que agonía da oír las radios de la meseta, es un monotema, un monólogo del equipo oficial del meseterismo.