La única buena noticia para esta navidad es en estos momentos la aparición de un muñeco, Peppa pig, que es la viva estampa del personaje conocido en el rancho como EL AMA DEL CALABOZO, así de directo. Si en su día se rieron del pelota y corre-ve-y-dile conocido popularmente como Furby, pues ya se encargaba de ponerla al día de lo que hacían los demás. Ahora han cambiado «las tornas». ¡Vaya casualidad!

Pues como dice el refrán  que «A todo cerdo le llega su San Martín», no puede ser más exacto, en este caso es en femenino. Haciéndole bien la pelota al Dios local, para seguir estando bajo su capa protectora, y que así, pueda seguir permitiéndole toda clase de desmanes, «supuestos acosos» que se ven a la lejanía, meteduras de pata, y demás tropelías, a su libre albedrío. Es extraño que le de tanta «manga ancha» en esos 2 grandes ranchos que domina. Pues de uno solo sabe la parte ofimática, y nada de lo técnico, y del otro un tanto de lo mismo. No le puedes pedir peras al olmo, ni sacar de donde no hay. Con lo que solo queda la función de vigilanta de la playa, pero en feo, o mejor, en versión zombie de Walking dead o World War Z.

Por lo demás sigo desmoronándome poco a poco, cayendo despacio por la sinuosa rampa al fondo del lecho del embalse, cual ahogado en esas aguas.

Estoy vendiendo aparatos que tengo de mi afición, poco a poco, para ir dejando un remanente cuando yo falte, quitándome «trastos de en medio» hasta que me quite yo definitivamente. Solo me queda este modo de expresión silenciosa, donde solo escribo lo que pasa por mi imaginación.

Y para acabar un gracioso video del personaje en cuestión.