NADANDO EN LA INCERTIDUMBRE

Incertidumbre solo por lo que pase de aquí a dos años cuando se acabe el consabido goteo de la

hucha estatal y ya no de más de si. Aún queda mucho pero mi impaciencia por no saber que ocurrirá, no tener planes hechos o preparados , no tener una bola de cristal, sin saber que ocurrirá más allá de unas horas. Oscura incertidumbre.

Viene a mi maltrecha memoria los discursos versión Fidel Castro que sufría mientras estar de BAJA era algo rentable para el Gran Rancho, discursos que eran proferidos por el animador de la Riviera-Maya, fichando cada mes, por si me pillaban en algún «renuncio», versión taurina

del fallo o metida de pata. Pláticas que cada vez eran más cortas, notándose que cada vez servían para menos, no ayudaban, nada ¿Para que han servido? Como ya se lo dije alguna vez, si no me podían ayudar…¿Que hacía allí? ¿Que motivo tiene este sujeto para citarme oficialmente si no es para cumplir un mero trámite? Al final de la procesión o visita oficial al animador , las visitas ya eran más elongadas en el tiempo (bonito palabro inventado), dándose cuenta este sujeto-predicador, que cuando son males del intelecto, poco pintan los alguaciles de barrio como él.

¿Y ahora qué? Ya no soy un estorbo para ellos sino para la SEG.SOCIAL o el INEM, o como se llame este ahora. ¿Que dirección tomar? ¿En quien confiar en el exterior?