Solo me faltaba ya el oir y ver después el bonito anuncio de convertir EL RANCHO en un servicio de urgencias para impulsivos compradores, algo incomprensible. Tanto «conciliar

la vida familiar», tanto ser una empresa de derechas, católica, apostólica y romana, y va y abren el dia que el «Señor Dios», les dijo que al séptimo día descansó. ¡Bonito eh! Me daban ganas de tirarme al tren,, y no coger una caja de Trankimazin sino dos, pues ya me dijo la «loquera oficial», la que me visita 10 minutos cada mes y medio, que con una caja estuve a punto de dejar el mundo de los domingos, no, quería decir, el mundo de los vivos. Cada vez es mayor esa fuerza interior que me arrastra al abismo de Helm (el del Señor de los Gramillos, para los que no sigan a J.R.R. Tolkien). Cada vez se reproduce con más fuerza con mesetas, tiempos más cortos entre sentimientos de querer dejar éste mundo. Me tiemblan las piernas, y a veces el pulso, aunque lo peor es ese sentimiento de finalizar esta larga marathon que se está convirtiendo vivir. Y eso que le dije a mi «dueña y Sra» que no habría una próxima vez, y ahí está el conflicto colectivo, algo más cruel que el que va a firmar en breve el pseudo-sindicato oficial del Rancho, que mucho decir siempre, convenio tras convenio: «Que no, eso no puede ser, no firmaremos, no podemos permitir eso, vamos a negociar un buen convenio, etc…» ¡¡¡¡¡ MENTIRAS !!!! Serán los primero en firmar com lo han hecho tantas otras veces. Ahora mucho teatro, mucha negociación, mucho «tenemos que sentarnos a acercar posturas», y «no podemos admitir este tipo de convenio», y a mentir como siempre lo han hecho, siempre haciendo de los voceros del GRAN SHERIFF, «corre-ve-y-diles», o lo más claro, los chivatos del Sheriff en cualquier rancho donde tengan a mal caer. Al principio te reultan simpáticos, son los «guays» del rancho, te dan palmaditas enla espalda con la consigna de «haces bien en estar en nuestro sindicato, pues los otros simple están en la lista negra», ¡Que atajo de mentirosos! Eso me duele más, que ninguno  abrirá la boca y firmarán su propia sentencia de  muerte si así se lo pidiera el GRAN SHERIFF durante la «negociación» (que no la hay pues ellos son el sindicato dominante), por algo fué el propio GRAN SHERIFF el que los creó para contrarrestar a los sindicatos llamados de clase.

Por la parte que me afecta lo estoy llevando mal durante estos pocos días que lleva en marcha ese maléfico cambio me estoy poniendo más nervioso, intentando buscar una salida para no volver allí, pues lo veo como entrar de remero de un galeón del siglo XVI o de la mismísima parca de la mitologia griega. Solo sales de allí si mueres, o se hunde el galeón. ¡Es demencial! Que ansia tienen que tener para hacer esa barbaridad de tener a todos allí metidos, mirándose unos a otros, solo viendo como pasan esas ramas en forma de bolas rodantes de las películas de vaqueros, y algún despistado que le faltan dos pilas a las 10 de la noche un Domingo de final de Abril. ¡Asco, y repugnancia! Nerviosismo o temor,rechazo e incomprensión, avaricia y despropósito, muerte o suicidio, de estas dos últimas no se cual elegir para quedarme tranquilo.¿Será este el final al que deseo ir? En estos momentos me temo que si, pero no me tiraré por la ventana ni al tren como pensaba mientras estaba esperando esta tarde en el andén para ir a llevar los «partes de guerra«, no se, no me va eso, prefiero algo más tranquilo. No hay porque fastidiarle la existencia al pobre maquinista que para el tren de repente, no ha hecho nada, solo le causaría un trauma que no le deseo.

«Ira y fuego», como decían en GLADIATOR, tal cual es el actual sentimiento hacia «mi pagador» actual, más almas en ebullición sin poder salir de ese infierno que para muchos se estará convirtiendo su estancia en el «Rancho», ¿Que pasará a mitad de Octubre cuando se hayan consumido las horas legales de estancia en los distintos ranchos? ¿A cogerse días libre así sin control alguno? Me extrañaria mucho que eso ni se les pasara por la cabeza, pues algo se rumorea en el ACTA DE DEFUNCION DE LOS HABITANTES DEL RANCHO, que va a haber un control de agrupación de días cuando al portador del látigo tenga a bien dar unos azotes de «agradecimiento» por pedir unos días libres. Creo que llegará un momento, si se firma éste convenio, que seguro que se hace sin mucha rectificación, por mucho que se hagan los héroes los del SINDICATO OFICIAL (o sindicato del crimen, como se les llamaba en USA en la época de Al Capone). Cada vez que pienso en esa apertura salvaje en el «Día del Señor» me entra la rabia contenida a la que nadie se ha opuesto ante esa acción de parecerse más a un servicio de guardia que a lo que es en realidad, que a excepción de la comida, lo demás de nuestra existencia materiales suplementario y lo podemos tener cualquier día de la semana. ¿Como si fuese preciso un Domingo comprarse los zapatos de la comunión de dentro de 6 meses, ¡Algo inaudito! Pero ahí está, puesto en marcha por el artículo 33, o lo que es lo mismo allí en el Rancho, por cojo……. y el que no quiera que pida la cuenta, que tienen ya un ordenador que se dedicará a eso exclusivamente. ¡ Deprimente,desolador,me mina la moral,desánimo,hundimiento,horror y pánico, oscuridad y fin !

¿Cuando acabaré con éste sufrimiento interior? Seguramente con otra buena dosis de pastillas, ésta vez definitivas.